La vida nos ha cambiado muchísimo en estos últimos meses, por culpa de la pandemia del Covid-19, un virus que parecía no entrañar demasiado peligro o estar medianamente controlado cuando llegó desde China, pero que nos ha hecho vivir una de las situaciones más extrañas y rocambolescas que se recuerdan, la del confinamiento durante más de dos meses, sin apenas poder salir de casa más que para comprar lo indispensable. Es como si la vida se nos hubiera parado de repente, como si hubiera quedado en standby. Las salidas con los amigos, las cervezas después del trabajo, los conciertos, el cine… Todo desapareció durante unas semanas, y todavía estamos intentando recobrar la tan ansiada normalidad, que parece que se nos resiste.
Sin embargo, hemos de estar al menos agradecidos por el hecho que este confinamiento nos ha cogido en la era de Internet, una ventana abierta al mundo que nos ha permitido estar conectados a todo lo que ocurre, poder disfrutar de series y películas para entretenernos, e incluso seguir haciendo deporte de forma online, a través de diversas aplicaciones o vídeos en YouTube. Y es que el ejercicio físico es uno de los pilares fundamentales de la vida sana, y al quedar encerrados vimos cómo también esta actividad se nos restringía bastante. Por fortuna hay muchas prácticas de ejercicios que podemos hacer también en casa, como el yoga, que no solo nos ayuda a mantenernos en forma y a ganar flexibilidad, sino que además también nos permite despejar la mente y concentrar nuestra energía en lo positivo, algo indispensable en estos días que nos ha tocado vivir.
Beneficios del yoga
Si bien el yoga es una práctica seguramente milenaria que se ha llevado a cabo en los países orientales durante siglos, y está muy ligada a la espiritualidad, no tanto a la religiosa como a la propia manera de entender nuestro espíritu, nuestra mente y nuestra alma, para alinearlo todo y conseguir un mejor desarrollo de nuestras mejores partes. El yoga se popularizó hace unas décadas también en Occidente, y desde entonces se ha convertido en una de las mejores alternativas de ejercicio tanto físico como mental, ya que produce beneficios en ambos aspectos. A través de sus diferentes posturas, el yoga nos ayuda a ganar flexibilidad y mantener la forma física, como una de las mejores alternativas para aquellas personas que no estén acostumbradas al deporte intenso, pero quieran seguir en forma.
También es muy positivo para la concentración, ya que nos ayuda a canalizar toda nuestra energía mental en un punto concreto, y concentrándonos así lograremos ser más eficaces en nuestra vida diaria. Fortalece los músculos de todo el cuerpo, ya que muchas posturas trabajan con prácticamente todo nuestro organismo, y además refuerza el sistema inmunológica, nuestra principal defensa ante cualquier ataque exterior. Por si todo esto fuera poco, hay otra gran ventaja de practicar yoga, que es aprender a controlar la respiración, algo indispensable a la hora de llevar a cabo las posturas, y que también nos servirá para mantener la calma en muchos momentos. Respirar de cualquier manera no significa respirar bien, y aprender a hacerlo con el yoga es una gran ventaja para aquellos que lo practican, que aprenden también a estar más en calma, a tener sosiego en sus vidas, alejándose del estrés tan dañino que nos rodea.
Hace Yoga desde casa
Habitualmente, el yoga se realiza en grupos más o menos grandes, controlados por un instructor o instructora que va desarrollando la clase a través de diferentes ejercicios, desde la meditación a las posturas, según el nivel del grupo. Esto se suele realizar en un gimnasio, o en una sala lo suficientemente amplia como para acoger a todos esos participantes en la sesión, con cierta separación entre ellos para poder practicar bien las posturas, sin estar encorsetados. Durante el confinamiento, esto ha cambiado por la imposibilidad de acudir al gimnasio a dar clases, así que hemos tenido que adaptarnos a hacerlo a través de Internet, en nuestra propia casa, con nuestra esterilla y nuestra indumentaria, como si estuviéramos en una clase presencial. A través de vídeos o sesiones de videollamada hemos podido seguir practicando este ejercicio tan beneficios, y más en los tiempos que corren.
Webs y apps para hacer yoga
Lo más habitual es que la mayoría de gente que quiera seguir practicando yoga en casa, con vídeos de Internet, los busque en la videoteca más grande de la red, que es sin lugar a dudas YouTube. En esta plataforma de vídeos podemos encontrar miles de opciones, tanto para las posturas en sí como con clases enteras, que podemos seguir de principio a fin, imitando a la persona que está en el vídeo, como si fuera el instructor que tenemos delante. También hay webs especializadas en yoga online, como Do You Yoga? o Yogateca, tanto en inglés como en español, que ofrecen clases y alternativas online para los amantes del yoga, así como grandes comunidades para entrar en contacto con personas con nuestros mismos gustos. En cuanto a las apps, hay una gran variedad tanto para iOS como para Android, destacando Daily Yoga y Yoga Gurú, con información completísima sobre posturas y demás.
Consejos antes de hacer yoga online
En realidad, hacer yoga online es muy parecido a hacerlo presencial, salvo por el hecho que no vamos a estar acompañados de otros alumnos, aunque bien podemos hacerlo en casa con otros miembros de nuestra familia. La preparación debe ser exactamente la misma que para hacer yoga, un precalentamiento obligatorio que nos permita hacer todas las posturas sin temor a dañarnos, así como un rato de meditación para estar concentrados a la hora de atender la clase. Si puedes revisar el vídeo que vas a ver durante la clase antes de empezar mucho mejor, porque así sabrás qué tipo de posturas vas a hacer, cuál es la intensidad de la práctica, etc…